Los padres y madres a menudo se preguntan en qué le han fallado a sus hijos. Las familias actuales se fijan unos listones cada vez más elevados y son más altas las exigencias hacia nuestros hijos. A veces, caemos en el error de comparar a nuestros hijos con otros o buscamos signos externos con los que medir y comparar su éxito.
En mi trabajo como psicóloga clínica, hay siete señales que puedo observar y que me dicen que un niño tiene un padre o una madre increíble.
Los siete signos de ser un padre o madre increíble son:
1.- Tu hijo muestra una gran gama de emociones frente a ti
A veces, es difícil que nuestros hijos sientan emociones delante de nosotros. Y a veces no deseemos ver a nuestros hijos mostrar dichas emociones. Pero la capacidad de tu hijo para expresar enfado, tristeza o miedo frente a ti es señal de que se siente emocionalmente seguro con contigo.
Me preocupa mucho cuando los niños ocultan los sentimientos a sus padres. A menudo, esto es señal de grandes problemas en la relación padre-hijo. Evita apagar o distraer a tu hijo de sus sentimientos. Presta atención y demuestra aprecio por ellos.
“Por la forma en que pateas la pared, puedo ver que estás muy enfadado. Y me estás diciendo que es porque tu hermana no te deja jugar”. De esta manera le dices a tu hijo que puedes comprender sus sentimientos y que entiendes su punto de vista.
2.- Tu hijo acude a ti cuando esta herido o tiene un problema.
Sé que un padre/madre está haciendo un trabajo increíble cuando su hijo llega a ellos como primer contacto para sus problemas. Esto significa que ha proporcionado una base segura a la que su hijo puede regresar cuando necesita ayuda.
Una buena forma de favorecer esto es recibir a tu hijo con los brazos abiertos y escuchar sus problemas, incluso si es pequeño o si el problema te parece insignificante. Esto establecerá la relación para estar abierto a la comunicación sobre los problemas en el futuro.
3.- Tu hijo puede discutir pensamientos y sentimientos sin miedo a tu reacción.
Esto es señal de una relación positiva padre-hijo, muestra que la relación es abierta y flexible, y que se acepta la comunicación y diversos puntos de vista. Algunos padres involuntariamente restringen la comunicación con sus hijos a través de su comportamiento, como con la reacción excesiva a los pensamientos o sentimientos que no les gustan o aquellos que cuestionan su comportamiento como padre.
Otros padres se muestran tan frágiles con sus hijos que no quieren que éstos carguen con sus pensamientos o sentimientos. Me preocupa cuando los padres dicen: "Mi hijo es mi pilar". Los padres son los pilares; los niños nunca deberían ser el apoyo de sus padres.
Acepta los pensamientos y sentimientos de tu hijo sin hacer que éstos interfieran sobre los tuyos. Si necesitas apoyo para tus pensamientos búscalo en otro adulto, no en tu hijo.
4.- En la relación con tu hijo tu opinión no critica ni etiqueta.
Los buenos padres no dan comentarios críticos sobre el comportamiento de sus hijos y evitan las etiquetas como "malo", "avaricioso" y "perezoso".
Si tu hijo se come todas las galletas de chocolate antes de dar la oportunidad de compartirlas con alguien más, un buen padre/madre se centra en el comportamiento “Te has comido todas las galletas sin compartir con tus hermanos. ¿Cómo crees que afecta esto a la relación de familia? En nuestra familia es importante que compartas con tus hermanos.”
Esto es muy diferente de decir: "Eres un egoísta, avaricioso... Castigado a tu habitación.”
5.- Alientas a tu hijo a buscar objetivos y desarrollar sus propios talentos.
Perseguir objetivos y desarrollar el talento propio ayuda a los niños a sentir una sensación de logro. Puedes involucrar positivamente a los niños durante los años de la niñez y la adolescencia enseñando la persistencia. Es maravilloso destacar en algo que amas.
A veces, veo a los padres dirigiendo los intereses de los niños para cumplir sus propios sueños y necesidades. Cuando obligas a un niño a sobresalir por tus propios motivos, todo tipo de cosas pueden salir mal, incluso cuando parece que van bien. Esto puede hacer que los niños se sientan el fracaso, sintiendo niveles intensos de presión y control.
Además, si fracasan y la ambición de un padre narcisista está detrás, los niños llevan la carga de decepcionar a sus padres además de su propia decepción.
6.- Creas límites en el comportamiento de tu hijo.
Los padres increíbles guían el comportamiento de sus hijos al establecer límites y límites considerados. Los niños sin límites a menudo terminan con muchos problemas o se pierden.
Los límites ayudan a los niños a sentirse amados y valorados, incluso si algunas veces no les gustan los límites. Algunos ejemplos de límites útiles incluyen una rutina para irse a la cama, un lenguaje respetuoso hacia los miembros de la familia etc.
7.- Reparas tus errores
Ser capaz de reparar las rupturas que se han producido es señal de ser un padre increíble. Si gritas, reaccionas de manera exagerada o incluso lo insultas, es muy importante reparar esa ruptura con tu hijo lo antes posible.
Habla con tu hijo de cómo deberías haber manejado la situación, esto puede ayudar. Explica que tus emociones se interpusieron en la forma en la que deberías haber respondido.
Estas son algunas señales de que eres un padre/madre increíble.
By N. Van der Linden